Más Que Una Corona… El Vestido De Beatriz Muller

Un conjunto de falda larga, corset y saco en cuyos costados se desplegaban bordados de color blanco que contrastaron con el tono ‘frío’ azul Klein del vestido, fue lo que lució la no primera dama de México, Beatriz Muller, al acompañar a su esposo Andrés Manuel López Obrador en el grito de Dolores la noche del pasado 15 de septiembre en el zócalo capitalino, para celebrar el aniversario 211 de la Independencia de México.

Para acompañar su outfit, la doctora en letras lució unas zapatillas color nude que combinaron con el tono perla de las aplicaciones en hilo.

Sin embargo, causó polémica como cada año, ya que en redes sociales rápidamente comenzaron los internautas a opinar acerca del tema, y mientras unos se encontraban a favor del atuendo, otros optaron por compararla con varios personajes famosos e incluso hacerle memes.

Pero de lo que nadie habla es que la doctora eligió perfectamente un equilibrio adecuado en su outfit, ya que para hacer juego con los detalles textiles, usó unos sencillos pendientes que lograban destacar por su peinado de cabello recogido que adornaba un solemne y elegante moño.

En el maquillaje pudimos observar que mantuvo una paleta de sombras e iluminadores naturales que la hicieron lucir fresca y elegante sin caer en lo exagerado para la noche más importante de México.

Dicho vestido de tres piezas fue bordado a mano por la diseñadora Luciana Corres, quie se ha desarrollado como pintora, escultora y quién lleva más de dos décadas en la industria de la moda mexicana, con un trabajo inspirado en técnicas antiguas como el telar de cintura.

Es de destacar que Luciana es sonbrina-nieta de la actriz Dolores del Río y nieta de Beatriz López Ostolaza, quien en el periodismo de la moda era la conocida como “Trixi”.

Mientras que el maquillaje, según la agencia de contenidos “Cuna de Grillos”, como en los dos años anteriores, estuvo a cargo de Manuel Ángel Rincón, mejor conocido como “El Chamo”.

Sin embargo, y desde mi personal punto de vista, el mejor vestido que ha usado la no primera dama ha sido el de su primera celebración de Independencia en el Palacio Nacional en 2019.

En aquella ocasión que fue la primera y última con un zócalo lleno de personas antes de la pandemia, Beatriz optó por un vestido verde largo y elegante, con encaje negro en los hombros, el cual acompañó con un cabello recogido y unas sandalias de tacón negro.